Se esperaba gran afluencia para
el derbi de la temporada regular, y así fue, nada más y nada menos que 23.000
aficionados presenciaron este partido. La eterna rivalidad entre equipos orcos y humanos
prometía dar el mayor de los espectáculos, aunque el resultado finalmente decepcionó al respetable (y a los aficionados que presenciaron el encuentro).
El partido comenzó con los Blood Brothers pateando, a la espera de
recibir el duro ataque de los Lunas Rojas. La estrategia de los orcos era
clara, saturar al ogro humano y mantenerlo ocupado mientras los más rápidos
marcaban un touchdown. Y así fue, en cuanto el árbitro pitó el inicio del
partido, los cuatro orcos negros del equipo orco se lanzaron sobre Bob Sapp, el
ogro del equipo humano. En el primer envite el resultado acabó con el ogro
derribado. A los orcos no les costó nada recoger la pelota y avanzar los
primeros metros de mano de Grumie, el famoso goblin del equipo. Pese a la leve
defensa en zona que estaban poniendo en práctica el equipo humano, Grumie
avanzó lentamente tras los imponentes músculos de los jugadores orcos
como si no tuviesen ninguna prisa por anotar. ¿Qué estaría pasando por la
cabeza de ambos entrenadores en ese momento?
Por suerte, no sólo se recogen mágicamente los
registros de voz de los entrenadores durante el partido, sino que también, gracias
a un mentalista que pasaba por allí, podemos ofrecerles sus pensamientos durante el partido:
Entrenador orco: “Urrrghhh whaaggghhh,
glukkkd dorg urrrgggg idkkkgggs rogggg whaaaaaagggggggg, muahh jajajajajajaja” (Traducción: “Jajajajajaja, ya
tenemos la bola, avanzaremos lentamente aguantando bien el balón hasta el
último turno, y entonces muah jajajajajajaja”).
Big Boss: “¡¡¡Bien!!! Avanzan
lentamente, pues perfecto. En su último turno me lanzo sobre el estúpido goblin
y le jodo el ataque, jajajajaja, y en la segunda parte ya veremos, a veces me
toco de lo listo que soy”
¿Cuál de los dos
se llevaría el gato al agua? Tras seis turnos que se hicieron eternos
y una perezosa defensa del equipo humano, éstos lanzaron un último ataque contra el
goblin que poseía el balón. No obstante, este intento fue neutralizado por los orcos que permitieron a Grumie "El Bombas" anotar un cómodo touchdown.
En la segunda parte le tocaba el turno al ataque humano.
Big Boss estaba confiado en poder lograr un buen ataque que al menos le diera a su equipo un empate. Los blitzer no tardaron en tomar las espaldas orcas mientras Tom
Brady cogía la pelota y realizaba un fantástico lanzamiento a un receptor desmarcado. La defensa orca reaccionó con rapidez y un blitzer orco derribó al receptor, mientras que Grumie, el valiente goblin del equipo, aprovechó para recoger el balón. Su equipo cerró filas en torno a él e iniciaron de nuevo su eterno avance, aunque en esta ocasión los humanos fueron más agresivos en defensa. Bueno, casi todos, ya que Bob (el ogro) estuvo entretenido sacándose los mocos casi toda la segunda parte. El avance fue inexorable y Grumie se encontró a las puertas del tocuhdown. Sólo con desmarcarse saborearía las mieles del triunfo... pero no, el defensa humano se impuso y Grumie cayó derribado, dejando el balón con en manos humanas pero demasiado tarde para contraatacar.
En resumen, un partido aburrido
que defraudó a todos los hinchas por la falta de sangre y de touchdowns. Especialmente por la de sangre.
Erz woooorg uuuuhffff aaushhh waaaaaaaarg! : La sangre de los rivales será el ponche con el que brindaremos nuestras futuras victorias. (Entrenador Orco)
ResponderEliminarNota del Editor: La errata existente en el último párrafo ha sido corregida, y el redactor convenientemente apaleado como corresponde reglamentariamente.
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